lunes, 23 de mayo de 2011

Traición Familiar

Comunicación vaga, recuerdos absurdos y conversaciones olvidadas, tantos años para un final desperdiciado, desparramado con lágrimas de plástico barato.

Preferible no recordar, así persigues el dolor que un día te daño, lo aplastas, lo lames y luego lo torturas, nunca intentes matarlo, sería una conclusión muy dulce para lo que paso, intenta seducirlo, quemarlo con fracaso, siempre fracasando en cada persecución así no hay olvido.

Cicatrices no ocultas, miedo no abandonado, pensamientos no profundos, son solo ilusiones falsas de algo que pudo ser y no fue, debilidad, amargura, desprecio, todo es una sola ejecución: “Traición”, inesperada pero muy familiar…



miércoles, 4 de mayo de 2011

Vente Conmigo


Hoy vente conmigo, no me hagas dudar un segundo más, quiero cerrar los ojos y despertar contigo a mi lado. Te elijo, ¿Acaso no lo notas?

No quiero plegarias ni miseria, ocupas muy bien tu lugar en medio de mi mundo abandonado, entregado al futuro, a ti.

Lo sé, adelanto hechos y construyo cuentos, mi mayor virtud inventarnos vidas, anécdotas, placeres, sentimientos, me gusta hacerlo a tu lado, con los ojos brillantes, delatores. Tomas mi mano, siento morir, como la primera vez que acepte escaparme sin remordimientos más que los de tu boca poco piadosa.

Te reinvento de nuevo, cierra los ojos, son solo mis dedos acariciándote, acostumbrándosen a tu pecho, ese que es mi hogar, mi única salvación cuando todo se cae, se evapora como el humo del quinto cigarro que intenta decirme que tu partida no fue más que un error de la vida, que pronto llegarás de nuevo, que te veré entrar por la puerta de mi alcoba y te acostarás abrazándome como siempre.

Hoy solo veo tu nombre escrito en un asqueroso papel blanco, creo que visualizo borrosamente una oración. ¿Para que una oración?, si de nada me sirve rezar, tu no vienes a mí, me dejaste, sin avisos y con muchas condenas, mi paraíso no es más que algo ficticio; escucho como hablan a mis espaldas, lo hacen como si yo no existiese, conspiran contra mí, tal y como lo hiciste tú, hablan de habitaciones blancas, de un lugar mejor para mi cuerpo, para mi mente, hablan de gente buena, de gente que me va a cuidar, de tratamientos efectivos y de una vida normal. ¿Quién quiere una vida normal?

Te fuiste es lo único que sé, tus promesas se jodieron, no queda nada más que tu nombre escrito en este ridículo papel de tu recuerdo, el boleto a de tu partida, lo que me recuerda y ata a ti, a tu maldita muerte.